En un animado y estimulante seminario que tuvo lugar durante el congreso de la EPA de 2018, Giovanni Stanghellini, Profesor de Psicología Dinámica y Psicopatología, Chieti University, Italia, afirmó que para conseguir un tratamiento eficaz es necesario reconocer cómo las personas con esquizofrenia interactúan y afrontan sus experiencias.
El Profesor Stanghellini manifestó que la recuperación requiere no únicamente la atenuación de los síntomas agudos sino también un cambio en la actitud del sujeto respecto a sus fenómenos anormales esenciales.
Los estados mentales de riesgo son indicativos de un riesgo inminente de psicosis
Andrea Raballo, Profesor adjunto de Psicopatología y Desarrollo en Trondheim, Noruega, afirmó que la expresión estados mentales de riesgo describe un conjunto de variables de presentaciones clínicas que comportan un riesgo más elevado de psicopatología grave, en particular del espectro psicótico. Típicamente, estos van acompañados de una modificación profunda de la experiencia subjetiva. Un paciente podría, por ejemplo, ser incapaz de conducir un automóvil.
Las descripciones que los pacientes hacen de este tipo de experiencias son, por ejemplo, “como si se hubiesen despertado algunas partes de mi cerebro”, “tenía los sentidos agudizados”, “estaba fascinado por cosas insignificantes”. Estas experiencias activan un circuito autogenerador de “significado profundo.” La subjetividad es el núcleo.
Los psiquiatras tratan la enfermedad, pero los pacientes quieren que traten su enfermedad
Dinesh Bhugra, Profesor de Salud Mental y Diversidad Cultural, King’s College, Londres, comentó que los pacientes con esquizofrenia consultan cuando la enfermedad afecta a su función social y personal. Los psiquiatras tratan la enfermedad, pero los pacientes quieren que traten su enfermedad, para poder funcionar a nivel laboral, doméstico y social.
El inconsciente de los pacientes se interpreta a través de las influencias socioculturales
El Profesor Bhugra señaló la necesidad de mostrarse empático al trabajar con los pacientes y manifestó que el inconsciente de los pacientes se interpreta a través de las influencias socioculturales. De esta manera, la enfermedad se convierte en una enfermedad centrada en el paciente. La estructura sociocultural crea la experiencia de enfermedad y tiene efectos sobre los síntomas y la curación.
El Profesor Stanghellini comentó que el mensaje transmitido por todos los ponentes era que es más importante considerar la experiencia de enfermedad que tiene el sujeto que centrarse en su conducta.
Otto Doerr-Zegers, Profesor de Psiquiatría, Universidad de Chile, Chile, aclaró esta distinción poniendo como ejemplo las alucinaciones auditivas: el síntoma es “oír voces” pero la experiencia es “alguien me dirige la palabra.”
Es necesario cambiar el enfoque de la experiencia al sentido que el paciente da a su experiencia
El Profesor Stanghellini comentó que la presencia anormal de uno mismo, una perspectiva alterada en la que los pensamientos se convierten en objetos, una fenomenalidad caracterizada por la introspección constante y ”vivir en la cabeza” son los dominios de la autoexperiencia anormal.
Comentó que el enfoque de los psiquiatras debe cambiar de la experiencia al sentido que el paciente da a sus experiencias. Es decir, el significado que los pacientes dan a las experiencias y cómo responden a estas. El fenotipo esquizofrénico es el resultado de la experiencia más la comprensión o interpretación de la experiencia que tiene el sujeto.
Reconocer diferencias sutiles en la experiencia del paciente permite un diagnóstico diferencial más efectivo
El modelo dialéctico de esquizofrenia centrado en la persona ofrece un contexto para comprender muchos fenotipos
El Profesor Stanghellini afirmó que el modelo dialéctico centrado en la persona (DCP) de la esquizofrenia añade la ”individualidad” a la noción de “identidad personal o mismidad.” La individualidad es más amplia que la identidad personal. La identidad personal es la vulnerabilidad básica y el yo alterado.
La individualidad da sentido a la experiencia y depende del tono emocional del sujeto y de la interpretación de la experiencia:
- Los tonos emocionales incluyen desapego, apatía, ansiedad, depresión, disforia, desesperación y exultación;
- La interpretación de la experiencia está influenciada por la educación, los valores y las creencias, y puede ser inexistente o rudimentaria, basada en la vida real (p. ej., “me han envenenado”) o metafísica.
La principal implicación clínica del modelo DCP es el desarrollo de un sistema descriptivo dual que incluye una evaluación del fenómeno de la identidad personal alterada y una valoración de los antecedentes personales. Reconocer estas diferencias sutiles en la experiencia del paciente permite un diagnóstico diferencial más efectivo, dijo el Profesor Stanghellini.