Calidad del sueño, inflamación y actividad matinal: influencia en la salud mental

No dormir bien es un factor de riesgo modificable que se ha relacionado con la depresión, la esquizofrenia y ciertas enfermedades físicas crónicas, y la inflamación podría ser un factor mediador. Durante el Congreso Anual de la Asociación Psiquiátrica Americana (APAAM) de 2021 se afirmó que existen indicios que sugieren que una intervención para mejorar el déficit de activación matinal (MAD) podría tener efectos positivos.

Para muchos de nosotros, no ser una persona diurna significa “tener dificultades para ponerse en marcha”, que el término déficit de activación matinal (MAD) describe de forma más técnica. Sea cual sea la terminología empleada, se trata de un fenómeno que se observa con frecuencia en la depresión.1,2

Aunque la falta de activación a primera hora de la mañana se ha considerado una consecuencia de la depresión, es posible que se trate de lo contrario: que la depresión sea el resultado de una falta de activación matinal. Stephen Smagula, de la Universidad de Pittsburgh, EE. UU., sugirió que, de ser así, fomentar la actividad matinal programando tareas en este horario podría ser un enfoque terapéutico útil. 

Una escasa actividad matinal puede propiciar a la depresión al facilitar más tiempo para pensar en contenidos emocionales negativos.

 

Base neurobiológica de la rumiación psíquica  

Esta hipótesis se probó en cuidadores de pacientes con demencia en riesgo de sufrir depresión. Cuidadores que presentaban síntomas leves o moderados se compararon con cuidadores con pocos o ningún síntoma:

  • Los datos de las actigrafías confirmaron la existencia de una asociación entre la falta de actividad matinal y la depresión: los cuidadores con síntomas depresivos eran significativamente menos activos que los controles, aunque solamente durante el periodo de 8-10 de la mañana.3
  • La inactividad matinal predijo la persistencia de los síntomas depresivos a los seis meses. Los cuidadores más activos por las mañanas parecían estar protegidos frente a  la aparición de síntomas.3
  • La base neurobiológica se constató mediante estudios de resonancia magnética funcional. En reposo, los cuidadores “no matinales” mostraron mayor conectividad entre la amígdala (implicada en la respuesta al temor y al estrés) y el córtex del cíngulo ventral posterior (implicado en la memoria autobiográfica) que los cuidadores matinales,4 y una mayor conectividad amígdala-cíngulo se correlacionó con la presencia de síntomas depresivos.

El Profesor Smagula apuntó que esta vía podría estar relacionada con la rumiación. La falta de actividad física matinal podría contribuir a la depresión facilitando más tiempo para pensar en contenidos emocionales negativos.

También comentó que una intervención basada en esta hipótesis sería factible y que en un estudio piloto llevado a cabo con diez cuidadores, la programación y la supervisión de actividades dirigidas por un terapeuta durante nueve semanas causaron una disminución en los déficits de actividad matinal comunicados por los propios sujetos.

En la esquizofrenia, la interfaz entre alteración del sueño, inflamación y envejecimiento es un nuevo objetivo de intervención 

 

No dormir bien es un factor modificable que se relaciona con el exceso de mortalidad

En la sesión sobre sueño y salud mental, Ellen Lee, de la Universidad de California, San Diego, EE. UU., comentó que la brecha de quince años (que sigue aumentando) en la esperanza de vida entre las personas con y sin esquizofrenia, se debe, en gran medida, a una mayor susceptibilidad a las enfermedades crónicas del envejecimiento.5

En la esquizofrenia, la interfaz entre alteración del sueño, inflamación y envejecimiento es un nuevo objetivo de intervención 

Dijo que se cree que procesos inflamatorios contribuyen a este inicio temprano de las patologías relacionadas con  la edad (o “inflamaenvejecimiento”) en las personas que padecen esquizofrenia, y parece que la mala calidad del sueño contribuye. Los problemas del sueño afectan al 30-80 % de los pacientes con esquizofrenia, preceden el inicio de los síntomas y están relacionados con peores niveles de calidad de vida y función cognitiva.6

Los datos iniciales de una cohorte longitudinal de pacientes con esquizofrenia y sujetos de control ilustran estas asociaciones:6

Los resultados involucran la mala calidad del sueño y la inflamación en la disfunción cognitiva y metabólica

  • En comparación con los sujetos de control, los pacientes con esquizofrenia dormían más y tenían una peor calidad del sueño
  • En pacientes con esquizofrenia, la mala calidad del sueño se relacionó con niveles más elevados de los marcadores de la inflamación proteína C reactiva e interleucina-6
  • Los niveles elevados de marcadores se relacionaron con una mayor lentitud del procesamiento cognitivo, incluso en ausencia de insomnio
  • Tanto la mala calidad del sueño como el aumento de los niveles de PCR e IL-6 fueron más frecuentes en mujeres que en hombres
  • Se ha sugerido que la mala calidad del sueño está relacionada con una disfunción metabólica evidenciada por un nivel elevado de HbA1c

Los datos preliminares de la cohorte de San Diego también sugieren que la apnea obstructiva del sueño es común en pacientes con esquizofrenia, observándose en un 48 % de los sujetos, aunque solo el 6 % habían sido diagnosticados formalmente. En dicho estudio, la apnea del sueño se asoció con inflamación y lentitud de procesamiento.

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Referencias

1. Hasler BP. Morningness-eveningness and depression: Preliminary evidence for the role of BAS and positive affect. Psychiatry Res. 2010 ; 176: 166–73

2. Van den Berg JF et al. Chronotype and depressive symptoms in students: An investigation of possible mechanisms, Chronobiology International 2018 35:1248-61

3. Smagula SF et al. Activity patterns related to depression symptoms in stressed dementia caregivers. Int Psychogeriatrics 2019; Oct 29;1-8.doi: 10.1017/S1041610219001601

4.  Smagula SF et al. Resting-state function connectivity associated with being a "morning-type" dementia caregiver and having lower depression symptom severity. Gerontol B Psychol Sci Soc Sci 2020 Aug 5;gbaa115

5. Lee EE et al. A widening longevity gap between people with schizophrenia and general population: A literature review and call for action. Schizophr Res 2018; 196:9-13

6. Lee EE et al. Sleep Disturbances and Inflammatory Biomarkers in Schizophrenia: Focus on Sex Differences. Am J Geriatric Psychiatry 2018; October 11, 2018DOI:https://doi.org/10